domingo, agosto 8

Peatón


Le había tomado tiempo, pero lo consiguió. Lo más complicado fue obtener la complicidad del jardinero. Estaba harto de que todos los días en cualquier momento la mirada de alguien se posara sobre él. Ello le obligaba a estar quieto y no precisamente en la mejor postura. Durante la noche se la pasaba dándose masajes en las piernas y no tenia mucho tiempo para dormir pues en cuanto salía el sol tenía que estar listo. Recordaba una vez que le sorprendió la madrugada durmiendo, pensó que le despedirían. Afortunadamente el guardia había celebrado la noche anterior la victoria de su equipo.
Ahora casi nadie se fijaba en él, podía estirar un poco una mano o el pie, inclusive voltear y si alguien percibía algún movimiento inmediatamente pensaban que era el viento agitando una rama. Lo único que le preocupaba es que por falta de sol estaba poniéndose muy pálido, cualquier día de estos le daban una mano de pintura extra. Posted by Hello